La temporada de ciclones tropicales en el hemisferio norte inicia en el mes de mayo y concluye en el mes de noviembre; estamos en la recta final de la temporada 2022.
Estos sistemas meteorológicos son de gran relevancia para todos los seres vivos y para nosotros, los seres humanos, son de vital importancia.
Un ciclón tropical es un remolino gigantesco que cubre miles de kilómetros cuadrados y tiene lugar sobre los espacios oceánicos tropicales. Cuando las condiciones oceánicas y atmosféricas propician que se genere un ciclón tropical, la evolución y desarrollo de éste puede llegar a convertirlo en un huracán.
La formación de los ciclones en los océanos se ve favorecida cuando la temperatura de la capa superficial del agua supera los 26° centígrados, aunado a la existencia de una zona de baja presión atmosférica hacia la cual convergen vientos de todas direcciones, y debido a una fuerza (denominada Coriolis) comienza a girar. Cabe mencionar que los ciclones se forman en zonas aledañas al ecuador en ambos hemisferios, pero en diferentes temporadas del año para cada hemisferio.
En resumen, un ciclón es un sistema atmosférico de baja presión donde los vientos soplan en contra de las manecillas del reloj en el hemisferio norte.
La fuerza de los ciclones esta determinada por la velocidad del viento. Todo inicia por un disturbio que al alcanzar vientos de hasta 63 km/hr es considerado una depresión tropical; cuando los vientos superan los 63 km/hr y alcanzan los 117 km/hr, se convierten en tormentas tropicales, y es cuando el Centro Nacional de Huracanes les asigna un nombre; si los vientos incrementan superando los 117 km/hr, el sistema es considerado como huracán.
Los huracanes se clasifican de acuerdo a la escala de Saffir-Simpson; ésta nos indica la fuerza y la posibilidad destructiva para la infraestructura de los asentamientos humanos. Las categorías de los huracanes son del 1 al 5, donde del 1 al 2, la fuerza se incrementa 10 veces, en la categoría 3 se incrementa 50 veces, en la categoría 4 aumenta 100 veces y la categoría 5 es 250 veces más fuerte que la categoría 1.
Los nombres de los huracanes son asignados en listas establecidas, los cuales están ordenados alfabéticamente y se intercala un nombre de mujer y otro de hombre consecutivamente. Las listas se repiten cada 6 años y los nombres de los huracanes que fueron destructivos se remueven de la lista ya que quedan registrados como eventos históricos, por ejemplo Katrina, Kenna, Gilbert, Nora, los cuales serán restituidos por otros nombres en la lista de huracanes de ese año.
Aunque los efectos de los ciclones pueden ser catastróficos, también tienen un efecto positivo ya que reducen los efectos de sequía en zonas áridas o con escasa precipitación pluvial, además transportan el calor de los trópicos a latitudes templadas lo que hace que sean un importante mecanismo de la circulación atmosférica global.
Los ciclones cumplen con la función de dispersión térmica, ya que remueven la energía de la radiación solar que es absorbida por los océanos, es decir los ciclones toman el calor del mar y lo llevan hacia la atmósfera dispersándolo por el globo terráqueo, por lo que las diferencias térmicas no son tan abruptas entre el ecuador y los polos.
Durante la temporada de ciclones es sumamente importante mantenernos informados de fuentes oficiales, como es localmente Protección Civil municipal y estatal. Necesitamos conocer la evolución y la predicción de las trayectorias para estar preparados y evitar pérdidas personales.
Ocean. Isabel Cárdenas Oteiza
@VALLARTAWHALES IG @IZAPTERA